Meteopedia

Vórtice polar

¿Qué es el vórtice polar?

Se denomina «vórtice polar» al patrón de vientos circumpolares de escala planetaria que se manifiesta en latitudes medias y altas, de oeste a este, en ambos hemisferios. 

Llamamos «vórtice polar ártico» a la circulación del hemisferio norte y «vórtice polar antártico» a la del hemisferio sur. En ambos casos, los vórtices existen debido a las diferencias de temperaturas entre la franja ecuatorial y los polos. 

Por otra parte, cuando hablamos de “vórtice polar” debemos distinguir entre el vórtice inferior y el superior. El primero de estos se ubica en la alta troposfera, y se conoce como “vórtice polar troposférico”. El segundo se encuentra en el interior de la estratosfera, y se denomina “vórtice polar estratosférico”.

Vórtice polar troposférico

Es una circulación de vientos intensos que, si bien está presente todo el año, suele intensificarse en invierno, cuando la temperatura del aire polar (encerrado en el vórtice) disminuye todavía más. 

Este vórtice separa el aire polar del aire más templado de latitudes medias, y se encuentra asociado a una corriente en chorro (o “jet stream”), que representa su límite.

Se extiende hasta los 50° de latitud aproximadamente, pero presenta ciertas ondulaciones que afectan al tiempo meteorológico de latitudes menores. De hecho, cuando el vórtice polar troposférico se fortalece (no presenta ondulaciones), el tiempo en Europa suele ser más húmedo en el norte y más seco en el sur. Sin embargo, cuando la circulación se debilita (y se ondula), se esperan irrupciones de aire frío y seco en el norte del continente y, por el contrario, ingresos de aire más cálido en las regiones que se ubican más al sur.

Vórtice polar estratosférico

El vórtice polar estratosférico es una circulación estacional, que se presenta únicamente durante el invierno. No es tan grande como el vórtice polar troposférico, ya que se extiende hasta los 60° de latitud aproximadamente. 

Si bien no afecta a la meteorología de alguna región en el corto plazo, todavía se está investigando de qué manera la actividad estratosférica puede transmitirse a la troposfera y alterar las condiciones del tiempo en capas bajas.

En algunas ocasiones, durante el invierno, el vórtice polar estratosférico puede sufrir algunas “roturas”, asociadas a un calentamiento repentino en el aire de la estratosfera, sobre los polos. Este fenómeno se conoce con el nombre de “Calentamiento Súbito Estratosférico”, y puede reflejarse en la troposfera luego de semanas, teniendo un gran impacto en la meteorología de latitudes medias, donde puede propiciar olas de frío muy significativas.

Vórtice polar y capa de ozono

Existe una relación muy estrecha entre el vórtice polar antártico y el agujero de la capa de ozono, que se ubica sobre la Antártida. 

A diferencia del vórtice polar ártico, el vórtice polar antártico es muy intenso y estable. Por tal motivo, casi no permite la mezcla entre el aire frío del polo sur y el aire más cálido de latitudes medias.

Este aislamiento tan significativo del aire frío resulta perjudicial para la recuperación de la capa de ozono, ya que su agujero tiende a cerrarse (o reducirse) cuando aumenta la temperatura, a medida que se acerca el verano austral.