El cambio climático intensificó rápidamente el huracán Laura
Javier Vegas
En pocas horas, el huracán Laura pasó a categoría 4, superando los pronósticos. Esta fue la causa.
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El huracán Laura no fue una tormenta cualquiera, y de hecho, las previsiones se quedaron cortas. El cambio climático sería la causa de su gran fortalecimiento en poco tiempo, pasando a ser categoría 4 antes de tocar tierra en Luisiana.
Pese a que en un inicio se esperaba que llegara a la costa como categoría 1 a 2, finalmente lo hizo como un intenso huracán categoría 4. Incluso se quedó cerca de pasar a 5, la máxima categoría.
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En tan solo 24 horas Laura se intensificó tanto de forma no esperada que el impacto terminó siendo mayor. En menos de un día sus vientos aumentaron en 105 kilómetros por hora y provocó un aumento del nivel del mar en la costa del golfo de 5.22 metros. Se trata de un nuevo récord que tenía el huracán Audrey en junio de 1995, con un aumento de 3.96 metros.
El fenómeno ocurrido con el huracán Laura no es algo insólito, y de hecho, se viene observando en la última década como consecuencia del cambio climático.
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Se estima que en la última década la intensidad de los huracanes en el Atlántico han aumentado un 8 por ciento. De hecho, no solo aumentan los vientos o las mareas, también la precipitación registrada.
La causa del aumento de intensidad de los huracanes
El responsable de este aumento de la intensidad es el calentamiento de los océanos, favoreciendo la evaporación y aportando más energía a las tormentas tropicales que se forman cada temporada.
Se estima que por cada grado centígrado de aumento de temperatura, hay un 7 por ciento mas de vapor de agua en el aire, multiplicando las posibilidades de formación de huracanes, especialmente su intensidad en poco tiempo.
Esta temporada de huracanes, de las más activas de los últimos años
Para que una temporada de huracanes sea activa se necesitan una serie de factores meteorológicos y atmosféricos, y actualmente las condiciones son muy favorables para que veamos numerosos desarrollos ciclónicos.
Tenemos temperaturas de la superficie del mar más cálidas que la media en el océano Atlántico tropical y el mar Caribe, una cizalladura vertical de viento reducida, y vientos alisios más débiles en el Atlántico, favoreciendo el desarrollo de ciclones.
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